por AméricaEcomía.com y Agencias
Brasil recibió este lunes dos buenas noticias en el ámbito de los negocios. Votorantim y Och-Ziff acordaron invertir US$ 308 millones para desarrollar proyectos inmobiliarios en el país, al tiempo que Mercedes Benz anunció el envío de US$ 928 millones para ampliar su capacidad productiva en tierras brasileñas.
Votorantim y Och-Ziff planean formar una asociación con promotores inmobiliarios residenciales y comerciales, para establecer una oficina de propiedades industriales y minoristas. Las inversiones podrían aumentar, ya que se suscribieron acuerdos con inmobiliarias de todo el país, dijo Votorantim.
"El acuerdo comienza con 500 millones de reales, pero nuestra intención es invertir mucho más", dijo Silvia Benvenuti, jefe de proyectos inmobiliarios de Votorantim Financas. El mercado inmobiliario de Brasil se ha expandido en años recientes durante un período de reducción de las tasas de interés, dando a la clase media del país acceso a hipotecas por primera vez.
En tanto, Mercedes-Benz do Brasil, subsidiaria del fabricante alemán de automóviles Daimler, dijo este lunes que invertirá US$ 928,2 millones en tres años, para ampliar su capacidad de producción. La planta de camiones, autobuses y componentes en São Bernardo do Campo, en el estado de São Paulo, expandirá su producción diaria en un 25% durante el período.
El presidente de Mercedes-Benz do Brasil, Gero Herrmann, hizo el anuncio en una reunión con el presidente brasieño, Luiz Inácio Lula da Silva, y luego con el gobernador del estado de São Paulo, José Serra.
"Actualmente, la planta está trabajando próxima a su capacidad máxima", dijo la empresa. La unidad brasileña de Daimler prevé aumentar la plantilla, actualmente de 12.000 empleados, pero no anunció cuántos trabajadores pretende contratar.
Mercedes, el mayor fabricante de vehículos comerciales de América Latina, tiene un 31% de participación en el mercado brasileño. Sus ventas de camiones crecieron un 31,5% entre enero y julio en relación con igual periodo del año pasado, a 22.700 unidades.
Estabilidad brasileña tienta a inversionistas. Este par de anuncios no son un fenómeno aislado en el país sudamericano. Más bien responden a una tendencia que se ha acentuado en el último tiempo. Mercedes-Benz, Votorantim y Och-Ziff, se suman a una variada lista de empresas que han decidido inyectar capitales en tierras brasileñas.
Basta repasar los anuncios públicos de los últimos meses: Bunge invertirá US$ 639 millones en plantas de etanol; ArcelorMittal, US$ 1.600 millones en la industria del acero; Repsol, US$ 1.500 millones para la explotación de dos yacimientos; Fiat, US$ 3.100 millones hasta 2010 y Ford, US$ 600 millones para ampliar la producción de motores, entre otras.
Las razones del interés se deben en gran medida al manejo económico de la administración de Lula da Silva: a fines de julio, la agencia de calificación de riesgo Standard & Poor's elogió la fortaleza económica de América Latina frente a la actual inestabilidad financiera, a lo que se suma la estabilidad política del país. "El Banco Central de Brasil está correctamente enfocado en mantener a raya la inflación", dijo la agencia de calificación de riesgo, al referirse a las tres alzas en la tasa básica de interés aplicadas este año por el Banco Central brasileño para enfrentar presiones inflacionarias (ver Brasil, el mejor de la clase 30/07/208)
En materia de crecimiento, las proyecciones del Banco Central para el país se mantienen en torno al 4,8% para este año, mientras para el 2009 rondaría el 3,73%. En tanto, el Fondo Monetario Internacional (FMI) señaló el pasado viernes que el crecimiento real del Producto Interno Bruto (PIB) brasileño estaría cerca del 5 % en 2008, agregando que el país había reducido la vulnerabilidad ante un deterioro en la economía global (ver FMI: Brasil debe contener demanda doméstica 08/08/2008).
Las cifras de inversión Extranjera Directa (IED) en los últimos años avalan el desempeño económico del país. Según el último informe de IED de la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal), en 2006 el país captó US$ 18.782 millones, mientras que en 2007 la cifra dio un salto a US$ 34.585 millones. Sólo México escolta de cerca de Brasil, con US$ 19.211 millones en 2006 y US$ 23.230 millones en 2007.
Las cifras auguran un auspicioso panorama. En momentos en que el mercado financiero vive una profunda crisis, la mayor economía de la región se empina como un mercado confiable que podría contagiar al Cono Sur. Chile y Perú, en el lado del Pacífico, asoman como los países con mayor estabilidad para seguir el ejemplo brasieño. Chile en 2007 captó US$ 14.457 millones y se proyecta un crecimiento económico del 4,25% según el FMI, mientras que Perú alcanzó los US$ 5.343 millones y el organismo proyecta un crecimiento en torno al 7%, cifras que avalan el potencial de ambas economías y que pueden convertirse en otro imán de millonarias inversiones.
